Todos los padres de familia buscamos lo mejor
para nuestros hijos, pero las buenas
intenciones no siempre producen
el mejor resultado. (Jane Nelsen)

¿Son para tí las juntas familiares?

¿Te gustaría potenciar tu capacidad de:

…expresar a tus hijos tu admiración y reconocimiento por algo que hicieron?
…mirar a tus hijos con una mirada fresca?
…hablar sobre alguna dificultad en un momento de calma y no a partir de un conflicto?
…ver tu responsabilidad ante alguna situación y así ayudar a tus hijos a ver la suya?
...tener una cercanía especial, un contacto profundo?
… de reconocer un error ante alguno de tus hijos y así enseñarles a convertir sus errores en experiencias de crecimiento?
... ganarte a tus hijos más que ganarles a tus hijos?
… centrarte en las soluciones más que en la culpabilidad sobre alguna acción?
... encontrar alternativas al castigo desde una posición de respeto mutuo?
…enseñar a tus hijos autodisciplina, cooperación, responsabilidad y cooperación?

Las juntas familiares son la puerta de entrada a una aventura que dura toda la vida.

5 criterios de la disciplina positiva.

• Ayuda a los hijos a experimentar una sensación de conexión (Pertenencia)

• Es simultáneamente respetuosa y alentadora (Firme y cordial al mismo tiempo)

• Es efectiva a largo plazo (Considera lo que el niño/adolescente está pensando, sintiendo, aprendiendo, y decidiendo sobre sí mismo y el mundo)

• Enseña habilidades sociales importantes (Respeto, preocupación por otros, solución de problemas y cooperación así como habilidades para colaborar en la casa, la escuela o la comunidad)

• Invita a los hijos a descubrir lo capaces que son (Alienta el uso constructivo del poder personal y de la autonomía).